INMUJERES autónomo, no dependiente de SEDESOL

Enrique Peña Nieto y su equipo de transición ha propuesto que INMUJERES deje de ser un organismo autónomo y se convierta en dependencia de SEDESOL.

La situación es preocupante, porque reduciría la misión y visión de INMUJERES una mera función ejecutiva, además sería dependiente de una Secretaría y eso retrasaría sus posibilidades de incidencia. Sería el retroceso en un camino que ha costado décadas de lucha.

INMUJERES tiene como misión "dirigir la política nacional para lograr la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, a través de la institucionalización y transversalización de la perspectiva de género en las acciones del Estado mexicano". No le corresponde sólo emprender acciones para el Desarrollo Social y es importante que no pierda su autonomía. ¿Cómo potenciar la autonomía de las mujeres -uno de los objetivos del Milenio planteados por la ONU- si INMUJERES pierde su autonomía como institución?

En estos momentos se está tomando la decisión en el Congreso sobre el estatuto que tendrá INMUJERES en la próxima Administración. No permitamos que lo reduzcan a la sombra, porque a la sombra reduciremos a las mujeres mismas y significará el rezago en la lucha por la igualdad y la equidad de género en México: la lucha contra discriminación, la promoción de la paridad y la corresponsabilidad en lo público, la vigilancia del Programa de Cultura Institucional con Perspectiva de Género (PCI), los Derechos Humanos y laborales de las mujeres, la erradicación de la violencia doméstica y de género. Todas estas cuestiones exigen una institución con liderazgo para promover Políticas Públicas, así como cambios a nivel gubernamental y sociopolítico, para que la perspectiva de género se logre transversalmente.

Necesitamos un INMUJERES que sea CABEZA entre otras instituciones y no APÉNDICE de una Secretaría carácter ejecutivo. Imagínalo dedicándose a dar "apoyos" a las mujeres, cuando su misión ha sido más trascendente en estos últimos años.